Hablamos con Javier Cuervo, CEO de 39ytu y Director General del Instituto Central Lechera Asturiana de Nutrición Personalizada.
El pasado 29 de Enero de 2019, la Fundación BBVA concedía su premio Fronteras del Conocimiento en la categoría de Biología y Biomedicina al investigador Estadounidense Jeffrey Gordon “por su descubrimiento fundamental de la importancia de la comunidad microbiana intestinal para la salud humana”.
Según el jurado de estos premios, “Gordon y su equipo fueron los primeros en demostrar la importancia del microbioma intestinal en la regulación de la fisiología animal. Tras este hallazgo fundamental, muchos grupos en todo el mundo han demostrado que los microorganismos que pueblan el intestino desempeñan un papel central en la salud y en enfermedades como la obesidad, la diabetes o la enfermedad inflamatoria intestinal, y podrían tener importantes implicaciones en la patogénesis de enfermedades neurológicas y en la respuesta a fármacos”.
En definitiva, Gordon y su equipo descubrieron que el conjunto de microbios que tenemos todas las personas en el aparato digestivo, la microbiota intestinal, es fundamental para la regulación de nuestro cuerpo y las alternaciones en la microbiota pueden causar enfermedades o incluso problemas de desarrollo.
Con este trabajo, también se inauguraba un nuevo área de investigación básica y ahora equipos de investigadores de todo el mundo trabajan para entender más a fondo el papel de los microbios en el funcionamiento de nuestro organismo y también se abren nuevas vías para el estudio de ciertas enfermedades y búsqueda de nuevos tratamientos.
Según el propio Gordon, “Mucha gente piensa en los microbios en términos bélicos, como si fueran enemigos”. “Pero lo que han desvelado nuestras investigaciones es que los microbios pueden ser nuestros amigos”. Las personas somos “una mezcla de componentes genéticos y celulares de microbios y humanos”.
Y es que no es que tengamos unos pocos microbios en nuestro organismo, si no que tenemos una legión de ellos. Nuestro cuerpo está formado por 30 billones de células humanas y 39 billones de células de microbios, así que somos más microbios que humanos.
De todos estos microbios, apenas un centenar de bacterias son malas para nosotros, y tenemos miles que son inocuos y otros tantos que son necesarios para que nuestro cuerpo opere de forma normal. Algunas de estas bacterias permiten a nuestro cuerpo que haga cosas para las que no ha sido capaz de evolucionar.
Aunque todavía queda mucho por investigar al respecto, ya se sabe que la microbiota afecta también al cerebro. Algunos estudios realizados sobre ratones demuestran que lso animales que reciben trasplantes fecales de personas con depresión acaban desarrollando síntomas de esta enfermedad, por lo que la microbiota puede tener impacto en todo tipo de enfermedades y no solo en las relacionadas con temas digestivos o cercanos.
Este campo tan incipiente ya está empezando a tener un impacto económico importante. Algunos analistas de mercado cifran el volumen de negocio de la industria del microbioma en unos 235 millones de dólares y este mercado crecerá hasta los 521 millones de dólares en 2022. Y, muy seguramente, en cuanto se tengan más respuestas y un mayor conocimiento de las bacterias de nuestro organismo y su funcionamiento, generará una industria de un tamaño descomunal ya que tiene el potencial de solaparse, al menos en parte, con la gran industria farmacéutica.
Para hablar de la microbiota y entender un poco mejor cómo puede impactar en nuestro día a día y el mercado y opciones de negocio que se abren a continuación, contamos con nosotros con Javier Cuervo, Director General del Instituto Central Lechera Asturiana para la Nutrición Personalizada y CEO de 39ytu, un proyecto de nutrición de precisión desde la microbiota.