Entrevisto a Ismael Labrador, Director de Marketing y co-fundador de Tuvalum, un Marketplace de compra-venta de bicicletas que está transformando este sector tan tradicional.
En un vídeo grabado en 1990, Steve Jobs nos contaba uno de los temas que le tenían obesionados y lo expresaba con estas palabras:
“Lo que realmente nos separa de otros primates es que somos creadores de herramientas. Leí un estudio que medía la eficiencia locomotriz de distintas especies del planeta. Resulta que un Condor es el animal que utiliza menos energía para desplazarse 1 kilómetro. Y los humanos aparecíamos en ese listado en una posición poco destacable, a un tercio del listado.
Pero en Scientific American publicaron un artículo donde se analizaba la eficiencia de una persona desplazándose en una bicicleta. Y resulta que cuando un humano utiliza una bicicleta para desplazarse, bate por completo el record del Condor y se posiciona como el animal más eficiente para desplazarse de toda la faz de la tierra.
Y eso es lo que una computadora es para mi. La herramienta más notable que hemos sido capaces de construir nunca y que es el equivalente a una bicicleta para nuestra mente.”
El artículo al que se refería Jobs era un especial publicado en Marzo de 1973 de la Revista Scientific American centrado en la tecnología de las bicicletas y donde se explicaba que una persona en bicicleta puede moverse 3 o 4 veces más rápido que andando pero usando una quinta parte de la energía en el proceso”.
Y es que la bicicleta es un invento tan maravilloso que es hasta capaz de mantenerse de pie y auto-estabilizarse sin intervención humana si va a una velocidad no demasiado baja.
Esto es algo que pasa desapercibido para muchos, pero que ha llevado a físicos e investigadores de todo el mundo a dedicar muchísimas horas investigando la física de las bicicletas, y durante años han explicado este comportamiento debido al efecto giroscópico y al efecto caster o efecto de lanzador.
El efecto giroscópico es un efecto físico que se da debido a que la rueda gira a una velocidad relativamente alta. Al girar la rueda genera una fuerza capaz de contrarrestar la fuerza de la gravedad y consigue mantener la bicicleta en pie (y lo mismo aplica para las motocicletas cuando van por encima de los 30 km/h)
El efecto caster o efecto lanzador es un efecto que permite estabilizar cualquier vehículo. Para ello, la horquilla de las bicicletas suele entrar de forma inclinada y no perpendicular al suelo. Cuanto mayor sea la inclinación, mejor es la estabilidad de la bicicleta o de la moto, como en el caso de las Choppers que tienen una horquilla extremadamente alargada. Pero nos vemos penalizados en cuanto a la facilidad de maniobrar y girar.
Y aunque estos efectos ayudan a que la bicicleta sea capaz de auto-estabilizare, una investigación de 2011 publicada en la revista Science, nos hizo ver que una bicicleta podía auto-estabilizarse sin efecto giroscópico y sin efecto caster lo que puso en tela de juicio todo lo que pensábamos que sabíamos sobre la física que afecta a las bicicletas y también nos explicó que había otras variables a tener en cuenta, así como que el equilibrio de todas estas variables tenía que estar muy bien planteado para que una bicicleta fuera estable.
Y es que, en realidad, sabemos mucho menos de cómo funcionan las cosas de lo que creemos que sabemos, y esto se aplica tanto a la física de las bicicletas como a cualquier aspecto del mundo que nos rodea o incluso de nuestro mundo interior.
Tenemos que tener siempre la mente abierta y cuestionarnos todo lo que creemos saber hasta el momento, tal y como nos explicaba uno de los grandes genios de la física, Albert Einstein, que nos decía “la cuestión importante es no parar de cuestionarse las cosas. La curiosidad tiene su propia razón para existir. Uno no puede evitar sentirse asombrado cuando contempla los misterios de la eternidad, de la vida o la maravillosa estructura de la realidad. Es suficiente si uno simplemente trata de comprender un poco de estos misterios cada día”.