En este post, te contamos cómo aprovechar el control financiero para multiplicar el crecimiento de tu compañía.
Al final, el éxito de una empresa es algo que está sujeto a infinidad de variables. El compromiso de los emprendedores, su estrategias de go-to-market, la organización, gestión de recursos, la planificación financiera o la forma en que transmiten su valor al exterior, son algunos de ellos.
De todos, hoy nos centraremos en el papel que juegan las finanzas en el crecimiento de una empresa o negocio. Te contamos cómo aprovechar el control financiero para multiplicar el crecimiento de tu compañía.
“Ya me ocuparé de las finanzas cuando necesite caja”.
Esta frase es muy común entre los emprendedores y un error garrafal donde los haya. De las finanzas hay que ocuparse desde los inicios. Es más, desde que se tiene la idea para emprender, hay que empezar a pensar en ellas.
No contar con una buena base y control financiero, puede hacer que se desperdicien recursos que, precisamente, al inicio, son más escasos y necesarios que nunca.
Por ello, los expertos siempre recomiendan ocuparse de las finanzas desde el principio. Y contar con una estructura financiera sólida que permita tanto el despegue como el crecimiento de la empresa. Para ello, algunas de las acciones a llevar a cabo son:
Lo ideal es conocer las métricas principales del negocio y sus benchmarks ideales de referencia, prestando especial atención al CAC, al CLTV y a la tasa de retención para unirlo a ingresos y costes. Así podemos unir el crecimiento a la caja, anticipándonos a posibles problemas.
Quizás una de las medidas que más preocupan a los emprendedores es la búsqueda de financiación. Hay quienes disponen de fondos propios y arrancan con ellos, pero también hay personas que sin una fuente de financiación externa no pueden arrancar o implementar estrategias de crecimiento.
En primer lugar, debes saber que si vas a iniciar con fondos propios y la startups está compuesta por varios socios, debes dejarlo todo muy bien atado. Lo ideal es dejar constancia a través de un documento contractual llamado pacto de socios, detallando qué ha aportado cada uno, qué derechos tienen por ello y qué obligaciones.
Dicho esto, y de forma resumida, las opciones más conocidas de financiación que actualmente existen para las startups son:
Spoiler: sin un buen control financiero desde los inicios, será muy difícil acceder a este tipo de financiación, es imprescindible anticiparse. Ningún organismo dará capital a una empresa que no tenga métricas, una buena estructura económica o no cumpla con ciertos requisitos ligados a ello.
Si sigues erre que erre y decides pasar de la gestión financiera de tu negocio, debes saber que te expones a lo que muchos llaman “morir de éxito” o, simplemente, morir.
Y es que para que una startup sobreviva, no solo debe facturar, también debe saber cómo gestionar sus recursos y, sobre todo, tomar decisiones que la acerquen a la rentabilidad.
En muchas ocasiones, vender más, no significa mayor crecimiento, sino todo lo contrario: fracaso asegurado.
Bien porque no hay control de circulante, no hay plan de contratación de perfiles clave, o porque el fondo de maniobra no sube lo suficiente las necesidades operativas de fondos, o porque el crecimiento de gastos es mayor al de ingresos,… Las causas son distintas, pero la consecuencia es la misma: el cierre.
Ya la consultora CB Insights describe la falta de liquidez o capacidad para levantar capital en la primera causa de muerte en startups. Por ello, una empresa que no tiene un buen control financiero desde el principio se ve obligada a tomar decisiones complicadas.
Algunos de los problemas más comunes a los que se enfrentan este tipo de negocios son:
Como podrás imaginar, en este escenario, el crecimiento de la empresa se ve totalmente comprometido.
Vistos los problemas que puede acarrear dejar de lado las finanzas, para un crecimiento sano y equilibrado, lo ideal es enfocarse en alcanzar el break even de la compañía.
Aunque el volumen puede generar ingresos, la rentabilidad es el indicador clave de la salud financiera de una empresa. En relación a ello, los aspectos más relevantes para potenciar el crecimiento son:
Por último, los expertos de Lean Finance nos han dejado algunos tips que pueden ayudar a muchos emprendedores a hacer crecer sus negocios. Se trata de una serie de consejos enfocados en sumar rentabilidad y hacer del control financiero del negocio un área sólida.
El crecimiento empresarial está estrechamente ligado a los beneficios derivados de la actividad principal desarrollada. Y para ello, el control de gastos y costos es fundamental. Es más, una gestión eficiente de los recursos puede liberar capital para inversiones estratégicas y mejorar la rentabilidad.
Antes de continuar, un apunte: costes variables y gastos fijos no son lo mismo. Los costes hacen referencia a aquel capital que se destina a inversiones que van a tener cierto retorno. Son, sobre todo, inversiones enfocadas en la viabilidad de la producción.
En cambio, los gastos están ligados al dinero necesario para que la empresa esté en funcionamiento. Por ejemplo, los alquileres que deben pagar o los sueldos de los miembros del equipo.
Dicho esto, si quieres mejorar el control financiero de costes y gastos, lo recomendable es:
Tener capital disponible para cubrir las necesidades operativas de una empresa es crucial para que esta crezca y sobreviva en el tiempo.
Esto se logra a través de una gestión eficiente del flujo de efectivo. En este sentido, las prácticas que mejores resultados ofrecen son:
Por último, el control financiero de un negocio se logra cuando existe una correcta planificación financiera a largo plazo. Esto deriva en un claro crecimiento estable y sostenible en el tiempo.
A la hora de elaborar un plan de este tipo, es importante contemplar puntos como estos:
Desde Lean Finance nos cuentan que durante todo el tiempo que llevan en activo han visto cómo empresas con una gran idea de negocio se han quedado estancadas por falta de control financiero. Y cómo otras, realizando las acciones precisas para asentar las bases financieras del negocio, han dado un cambio radical en sus resultados y en su crecimiento.
Cuando se arranca una empresa, es normal que no se cuente con personal cualificado para ocuparse de esta área, sin embargo, no es excusa para no hacerlo.
Delegar de manera externa el control de las finanzas puede ser la solución para no caer en problemas o bloqueos como los que hemos descrito aquí.
En cualquier caso, si necesitas más información sobre el tema, ellos pueden ayudarte.
Estés en el punto en que estés con tu negocio, si deseas despegar o crecer, ellos son el CFO que necesitas en tu equipo. Escríbeles y déjate asesorar por expertos.
Actualmente es CEO de Lean Finance y co-fundador en otros proyectos o empresas, como Asenze. Está invirtiendo de forma activa en startups en fase pre-seed y seed. Ha desempeñado varios puestos directivos en empresas en diferentes sectores (aunque siempre poniendo el foco en lo que mejor se le da, las finanzas). También ejerce de profesor en la Universidad de Loyola y de formador en campus de emprendedores, aceleradoras de empresas e incubadoras.