Aumentar la conversión a través de la verificación de identidad

Verificar la identidad de tus usuarios de manera remota y sin fricciones, a la par que segura, y cumpliendo con la regulación es un todo un reto para una empresa, pero puede ayudarte mucho a aumentar la conversión.

En 2022, aumentó un 15% el número de cuentas fraudulentas que se creaban para realizar diferentes estafas de identidad, desde hacerse pasar por otra persona a crearse una identidad sintética para salir impune de algún delito. 

Debido a ello, las autoridades han ido estableciendo regulaciones cada vez más exigentes, que si bien son efectivas desde el punto de vista de la seguridad, no hace más que poner trabas a un proceso de verificación de identidad que debería ser rápido y sencillo. 

Según Statista, las instituciones financieras en EEUU experimentaron de media un 63% de tasa de abandono en el proceso de Know Your Customer (KYC). Con la consecuente pérdida de clientes. 

Cada día, surgen más casos de uso donde la comprobación de la identidad es un componente esencial de la experiencia de alta o adopción de un producto digital. 

En sectores como la movilidad compartida, donde validar tu identidad (incluyendo edad y carnet de conducir en regla) antes de conducir un vehículo o en redes sociales, donde con el auge de la realidad virtual y las IAs generativas es cada día más difícil discernir entre una persona real y una construida digitalmente. 

Pasando por las aplicaciones fintech, la banca digital, eCommerce de productos de lujo, el alquiler de coches o los check-ins desatendidos en hoteles y apartamentos vacacionales.

Entonces… ¿cómo se compagina una verificación de identidad que minimiza el fraude al tiempo que mejora las tasa de conversión en un producto digital? 

Un caso práctico: Verse y Paella B. Festival

Verse, app para realizar pagos compartidos desde el teléfono móvil, tiene gran parte de sus usuarios en un rango de edad cuya principal característica es la inmediatez.

Recientemente, están colaborando con el festival de música alicantino, Paellas B.Live. Verse necesitaba de una solución que pudiera validar al comprador y asistente al festival de la manera más rápida y sencilla, al tiempo que reduce la creación de perfiles falsos, cuentas fraudulentas o la suplantación de identidad.

A continuación te contamos cómo, desde el perfil de Instagram y en menos de 2 minutos, se puede completar el alta en el móvil, incluyendo el registro, la compra de entradas y la identificación del usuario.

En un primer paso, desde la cuenta de Instagram te permite descargar la aplicación Verse, para seguidamente abrirla y crearte un perfil con tu número de teléfono móvil. Una vez hecho esto, toca verificar la identidad del usuario. 

Validación del documento de identidad para aumentar la conversión

Primero se le pide que muestre su documento de identidad a la cámara trasera del móvil. No es necesario teclear la información, tomarle una foto o tener que remitirlo por email a una dirección concreta, lo que retrasaría el proceso de validación.

Al instante, el sistema de reconocimiento OCR detecta el tipo de documento y extrae la información del mismo. Al tiempo que realiza por detrás numerosas comprobaciones de seguridad.

Captura de selfie 

En el segundo paso, se abre la cámara frontal y se le pide al usuario que sitúe su rostro dentro del óvalo central. Sin necesidad de hacer fotos desde diferentes ángulos, o hacer algún tipo de prueba de vida activa como mover la cabeza, sonreír, guiñar un ojo, etc. Lo que suele disminuir la tasa de conversión, ya que muchas veces el usuario tiene que hacer varios intentos y acaba desistiendo.

En este momento, el sistema de reconocimiento facial trabaja a fondo para, por un lado, reconocer que hay una persona real detrás de la cámara, y por otro, comprobar que es quien dice ser, y sus rasgos faciales concuerdan con los del documento de identidad.

Este sistema también evita problemas de conversión frente al uso de una foto escaneada de baja resolución o manipulada.

¡Y ya hemos terminado! Puedes ver que este proceso se realiza en menos de 1 minuto.

Implementar una experiencia de verificación de la identidad rápida y segura hoy es perfectamente posible

Cada empresa tiene una casuística concreta, pero con un denominador común, el proceso de verificación de identidad a de ser rápido y sencillo, a la par que seguro. 

Ayudando a maximizar el ratio de conversión tanto en el alta de nuevos usuarios como cada vez que necesites verificar la identidad de tus usuarios o trabajadores.

“Gracias a Alice somos capaces de tener un onboarding con la menor fricción posible a la vez que fortalecemos la seguridad de la comunidad Verse.”

Naike Sainz, COO de Verse

Aumentar la conversión con Aprendizaje Automático

¿Te imaginas tener que contrastar manualmente el 100% de tus altas? 

Dedicando varios minutos por usuario en revisiones manuales y sujetas a error humano… resultado de la conversión: <10% Ya que a cada segundo que pase, es un segundo que tiene tu potencial cliente para abandonar el proceso.

¿Y si dejas pasar a todos los usuarios sin verificar? Al margen de que en algunos sectores es una obligación legal, la tasa de fraude se dispararía y el nivel de pérdida económica sería inasumible. 

Sin embargo, en la actualidad existen soluciones que aúnan seguridad y experiencia de usuario optimizada que a la vez ayudan a aumentar la conversión de tu producto digital, como Alice Biometrics. ¿Cómo se consigue esto?

• Con una experiencia de usuario inteligente
• Con un sistema de toma de decisiones basado en IA rápido y automática
• Con tecnología antipoofing y prueba de vida pasiva para la reducción de fraude
• Con una integración sencilla 

Si tenemos en cuenta los límites legales de hacer Growth, nadie se escapa de exponerse a este tipo de riesgos. Incluso en entornos más reducidos y controlables como los órganos de gobierno, existe el fraude (si tienes interés, te recomiendo ver el documental Enmascarado, para ver cómo la ingeniería social y el uso de máscaras consiguió estafar millones de euros a la élite francesa tras los atentados de París en 2015).